Varias veces he contado una anécdota que me sucedió hace más de 20 años, durante una visita a casa de mis padres en San Sebastián mientras vivía en Barcelona. Mi abuela materna (que en ese momento tenía unos 90 años) me hizo una pregunta aparentemente inofensiva cuando me vio sentado en la cama tecleando en el portátil. “¿Qué estás haciendo?”…
